Edica Ltda. tiene como filosofía lograr un equilibrio entre la funcionalidad de los diseños y la innovación por nuevas técnicas de construcción. Los cinco edificios de la Zona Franca América, en Heredia, son una muestra de ello.
Edica incursionó en la construcción de edificios en la Zona Franca América en el 2015, y durante los últimos seis años ha desarrollado un total de cinco proyectos en esta categoría. En cada uno de ellos logró un equilibrio entre la funcionalidad de los diseños y la innovación, poniendo en práctica la experiencia adquirida desde sus inicios.
Estas infraestructuras implicaron el desarrollo de una ajustada y retadora logística, ya que su construcción debía coexistir con la rutina de los trabajadores de la zona franca, sin ocasionar ningún tipo de alteración en su funcionamiento. A esto se sumaba también lo ajustado del tiempo de entrega, por lo que la planificación de cada una de las etapas de trabajo también fue esencial.
“Los primeros edificios que se realizaron, entre el 2015 y el 2016, fueron los F-33 y F34. Constaban de cuatro niveles de parqueo y tres de oficinas, en un total de 37.350 metros cuadrados. En uno de ellos se nos solicitó construir un helipuerto sobre uno de los edificios, algo que nunca había realizado Edica. Esto nos implicó un reto enorme, pero también dejó muchísimo aprendizaje, que se ha puesto en práctica en otros proyectos”, explicó Franklin Amén, gerente asociado de la constructora.
En esta obra gris se implementó el sistema postensado, una técnica que fue impulsada por el ingeniero Federico Lachner en un inicio, y que consiste en un sistema de refuerzo utilizando cables de acero y no varillas. Sin embargo, lo que vino a poner el sello de Edica en esta construcción fue el uso de la formaleta conocida como “mesa”, que se importó desde Panamá, y que por primera vez era utilizada en nuestro país.
Fue así como estos edificios marcaron un antes y un después, tanto para la constructora como para el equipo humano que forma parte de ella, gracias a la innovación ejecutada durante el levantamiento de la infraestructura. Con ello, una vez más, la constructora demostró que su trayectoria es sinónimo de calidad.
“Las técnicas utilizadas, la construcción del único helipuerto en la Zona Franca América y la pista en espiral que comunica cada uno de los niveles de parqueo, son elementos que hacen de estas obras un verdadero ícono en el complejo. Fue de esta forma que también incursionamos en construir dos edificios interconectados, algo que tampoco se había hecho allí”, recordó Amén, quien tiene más de 35 años de experiencia.
Con él coincide Erick Rivas, ingeniero, que desde hace 13 años forma parte de Edica, y que también fue uno de los miembros del equipo de trabajo del F-33 y F-34. Posteriormente fungió como gerente de proyecto en la construcción del E-23, que inició en el 2020, y cuyas obras finalizaron en el año 2021.
Allí, tuvo la oportunidad de trabajar con uno de los socios de la constructora, Alberto Broutin, quien también tiene una amplia experiencia en zonas francas, gracias a su rol en las edificaciones E-21 y E-22. Para ambos ingenieros, la evolución de la compañía quedó plasmada en todas estas obras, por la enorme exigencia logística y el reto operativo que implicaron.
“Una vez que logramos superar la curva de aprendizaje en todas estas edificaciones, logramos obtener rendimientos bastante altos y nos volvimos sumamente eficientes en la ejecución de este tipo de proyectos, que son vistos como una máquina de precisión que deben funcionar de manera correcta. Ese es nuestro principal trabajo”, afirma Rivas.
Por su parte, el socio Alberto Broutin, asegura que el consolidarse en un área de negocios como esta no sería posible si Edica no estuviera respaldada por un equipo humano que no teme innovar, apostar por su talento y que no titubea al momento de decidir lo que será mejor para el cliente.
“El ser un referente de la construcción en Costa Rica no sería posible sin nuestros colaboradores, quienes están dispuestos a aprender y aportar al crecimiento del país con una infraestructura de primer mundo”, expresó.
Con los proyectos ejecutados hasta el momento en Zona Franca América, la constructora continuó firme en su propósito de contribuir al crecimiento económico de nuestro país, esto gracias a la expansión de los cientos de plazas de trabajos a lo largo de los últimos seis años.
